¿Por qué Maceda no es turística?

Dando una vuelta por el pueblo y ampliando el paseo a la totalidad de nuestro municipio no lo entiendo.

Comencé por el rio y el paseo fluvial, un retorno a la época en la que solo existia el hombre y su naturaleza. Subiremos por las piscinas, estupendo centro de ocio para el verano y una pena que el bar no funcione todo el año, a lo lejos el paisaje de la sierra nos vigila durante todo el trayecto.

Ya en el centro del pueblo, echamos de menos no tener un casco historico más compacto, más bonito, pero hay que sacar provecho a lo que tenemos, las callejuelas de la calle del medio, los soportales de la plaza de las toldas, la iglesia que tenemos algo "encajonada", seguimos por la calle principal, la plaza Cervantes, el cafe "O Carro" como centro de reuniones y tertulias, la galería del antiguo cafe ahora reconvertida en estudio fotográfico.

Tomamos un café y seguimos hacia las Canteras, recordamos con añoranza los antiguos árboles que recubrian toda la calle, la fuente de las Canteiras, casi se puede oir el eco del jolgorio del Colegio de las Monjas como una Psicofonia.

El pabellón de deportes y el parque, la biblioteca como centro de reunión de internautas, el castillo medieval, la iglesia de San Pedro, de nuevo la sierra desafiante.

Volvemos a bajar, A Costa do Sol, la zona de marcha nocturna, la recta de los Milagros y los pasteles del Baldomero, la barriada gitana.

Doy vueltas sin cesar y durante mi caminata no dejo de pensar en el gran potencial turistico que tiene Maceda, pero bueno, si no sabemos aprovecha lo que tenemos tendremos que pintar las vacas de colores como si fueran piedras del Ibarrola.

O dejar morir el pueblo... ya veremos.